Cuando estudias puedes pasar varias horas tratando de asimilar la información. Si tienes una mala postura, lo más probable es que, a cambio de aprender algo, acabes con un buen dolor de espalda o cuello.
Para prevenir estos inconvenientes es necesario no sobrecargar las diferentes áreas de la espalda, relajar tanto la columna como los músculos.
Mantener la espalda encorvada o doblada hacia un lado puede traer bastantes problemas que no solo se reducen a un simple dolor. Si quieres una buena salud en tu espalda, aquí te explicamos cómo sentarse correctamente para estudiar.
Postura correcta para sentarse a estudiar
Al estar en casa o en tu sitio de estudio puede parecer difícil mantener una postura erguida En realidad esto es lo más favorable para la columna vertebral ya que mantiene su curso natural, libre de tensiones y vértebras presionadas.
¿La ventaja? Conseguir más horas de estudio sin cansarte demasiado. La columna es uno de los principales centros de gravedad de tu cuerpo, si no está alineada tus músculos y vértebras sufrirán las consecuencias.
Para sentarse correctamente se necesita tener una espalda derecha, pero sin llegar a estar tensa. Esto es muy importante ya que podemos evitar dolores en la espalda de origen cervical y lumbar.
Tu cuello debe estar levemente inclinado para permitirnos ver con facilidad, pero nunca hacerlo exageradamente. El esfuerzo de los músculos se multiplica a causa de la gravedad, algo que puede generar dolor en poco tiempo.
- Los hombros deben seguir el curso de nuestra espalda y estar derechos para lograr un buen equilibrio
- Las piernas deben estar relajadas
- Al muslo le corresponde estar recto conforme a ellas
- Tus pies en un buen apoyo sobre el suelo.
¿Existe la mejor postura para estudiar?
Existen claves para conservar la mejor postura para estudiar.
Un ejemplo es colocar un soporte como una almohada o cojín en tu espalda para reducir el esfuerzo y peso que debe soportar.
También existen accesorios especiales como el cojín lumbar. Éste se adapta perfectamente a la forma de la espalda y ayuda a reducir considerablemente los dolores lumbares.
Sin embargo, puede suceder que esto no sea suficiente para mantener una buena postura. Atención en la ergonomía de tu sitio de estudios.
Uno de los primeros factores que puede ayudar a controlar el dolor de espalda es la altura de nuestra silla. Tienes que verificar que:
- Esté a una altura similar desde las rodillas al suelo
- Te permita dejar descansar los muslos rectos sobre ella.
Otro detalle es la mesa o escritorio: la altura adecuada debe llegar a mitad de tu estómago, si es más baja puede forzarnos a orientar tu cuerpo hacia delante y encorvar nuestra espalda. El escritorio también puede contar con una ligera inclinación para hacer más cómodo su uso.
Para medir la distancia correcta entre el escritorio y tú necesitas verificar que:
- Tus codos estén flexionados con comodidad
- Las muñecas se apoyen sobre el escritorio
Mejores posturas para estudiar sentado
La postura que normalmente se usa para estudiar es estar sentados. Eso significa que hay que cuidar aún más cómo se coloca la espalda, ya que ésta es la postura por excelencia.
Básicamente se trata de relajar tu cuerpo lo más que se pueda y procurar que los músculos no estén tensos.
Cambiar de posición cada cierto tiempo es una gran ventaja para relajar los músculos y articulaciones. Este hábito hará que sea menos propenso a empezar un ciclo de dolor ya que no están completamente estáticas.
Mantener la espalda derecha es primordial, pero si en algún momento se siente el cansancio lo mejor es:
- Usar el respaldo de la silla para apoyar la espalda
- Levantarse cada cierto tiempo y estirar el cuerpo
Todos estos consejos te ayudan a prevenir y aliviar dolores.
Mejores posturas para estudiar en el ordenador
Si en lugar de un cuaderno se utiliza un ordenador, lo mejor que se puede hacer es fijar la vista en la pantalla y no en el teclado, así no te esforzarás de más.
Usar un monitor situado a la altura de tus ojos es lo ideal para mantenerse derecho.
Los ojos deben estar a una distancia de al menos 45 cm de la pantalla para evitar el cansancio visual.
En caso de que sea un ordenador portátil es más difícil procurar tener una buena postura, esto se debe a que tu mirada debe dirigirse hasta la pantalla.
Si ésta es muy pequeña, necesitas inclinar demasiado la cabeza y eso suele generar problemas como dolores en las vértebras cervicales y rigidez en el cuello.
Mejores posturas para estudiar en la cama
Estudiar en la cama no es una de las mejores opciones para tu cuerpo y tampoco para tu concentración. Esta conducta puede llevarte a restar importancia a la información y se vuelve una tentación dormir en lugar de estudiar.
La mala postura que se adquiere en la cama también es una de las razones por las que no se aconseja hacerlo.
Cuando estás sentado o acostado apoyado en tus brazos es muy posible que la cabeza, el cuello y la columna se mantengan en una posición inclinada o doblada. Es importante buscar otro lugar en el cual estudiar.
¿Por qué es muy importante tener una buena postura para estudiar?
Este tema no debería tomarse superficialmente ya que influye bastante en la salud de la columna, hombros y brazos.
Existen varias afecciones que tienen la desventaja de reducir la calidad de vida y están ligadas a una mala postura. Por lo que, si pasas varias horas en esta actividad sin cuidar la postura, podría traernos consecuencias.
Al estar mucho tiempo en esta posición es posible que comiencen los dolores de espalda, músculos, cuello y hombros.
Pero si no mantienes una espalda derecha hay posibilidad de desarrollar hernias discales, estas son causadas por un desgarro de un disco de la columna.
Además de esto, también están la lumbalgia, dorsalgia y cervicalgia. Estas afecciones son dolores de espalda crónicos que pueden tener lugar en cualquier región de la columna.
Mantener una buena postura para estudiar es algo de suma importancia ya que ayuda a tener buena irrigación sanguínea y permite que la columna mantenga su posición normal.
Los dolores de espalda pueden reducirse en mucho gracias a este buen hábito. Inconvenientes como la rigidez y cansancio muscular no deberían ser un problema mayor. Con una espalda derecha, cuello relajado y hombros sin tensión, es mejor afrontar las horas de estudio que sean necesarias.
