Salir a correr se ha vuelto un deporte de moda. Cada vez son más las personas que deciden salir a hacer “running” como una manera de ponerse en forma y despejar la mente. Sin embargo correr bien requiere su técnica, de lo contrario, no solo se pueden provocar dolores y lesiones, sino que además harás un gasto energético innecesario por tener una técnica ineficiente de carrera y acabarás abandonando al poco tiempo.
Por ello, aquí te contaremos cuales son las claves para correr con la postura adecuada.
¿Existe una postura universal para correr bien?
La técnica correcta de carrera es universal y se adapta a todo tipo de cuerpo. No existen variantes para la postura de correr. La manera correcta de correr está determinada por la eficiencia de los movimientos que la componen y a continuación te vamos a contar como debe ser.
Cómo correr con buena postura
Una buena postura para correr implica mantener la cabeza erguida, con la mirada al frente. Mantén los hombros y el cuello relajado para evitar tensiones en los trapecios. Flexiona los codos a 90° con los brazos paralelos al tronco y las manos firmes pero sin apretar.
El cuerpo debe ir inclinado hacia delante con el tronco erguido y el pecho abierto sin perder la alineación hombros caderas. Las rodillas deben apuntar al frente y la flexión no debe ser mayor de 30°. Al aterrizar hazlo sobre el medio pie.
Al correr es importante mantener un buen braceo para acompañar la carrera y darle más fluidez. Pero debes tener en cuenta de no exagerarlo cruzando los brazos por delante del cuerpo.