Para hablar ante un público hay que tener en cuenta la imagen que vamos a dar con nuestra actitud, dicción y conocimientos, pero estos factores no son todo, una buena postura crea seguridad y da una buena imagen en cualquier lugar, ya sea en una conferencia importante, exposición de proyecto o en el ámbito educativo.
En una presentación para el público lo mejor que puedes hacer es manejar tus movimientos y evitar los que se vean más forzados y sin naturalidad. Una postura correcta para hablar en público es primordial para mantener una buena presencia y proyectar mejor tus ideas a los oyentes.
Consejos para tener una buena postura corporal para hablar en publico
Hablar en público requiere de ciertas características que debemos cumplir si queremos dar una buena presentación, y la postura corporal es una de ellas. La postura que adquieres al inicio de una exposición es el reflejo de la seguridad y conocimiento que manejas sobre el tema, por lo tanto, es necesario mantener una buena postura que cree firmeza y naturalidad al hablar.
La posición que debemos asumir es sencilla, pero puede suponer un pequeño inconveniente si no nos hemos acostumbrado a hablar en público manteniendo una postura estable. Primeramente, el mantener una espalda derecha, pero sin llegar a estar rígida, es un requisito para proyectar confianza y seguridad. En cambio, una posición encorvada o inestable y en el caso de tener la costumbre de moverse o balancearse sin necesidad, no proyectaría credibilidad o buena imagen.
Mantener la cabeza erguida, sin llegar a exagerar y mantener la mirada en el público por ciertos intervalos de tiempo, ayuda a que se sientan incluidos en la charla que estás dando. Estos factores ayudan a que la atención de los oyentes este fija en tu presencia y en lo que quieres transmitir con el tema que expones.
El uso de las manos es una característica que puede llamar mucho la atención del espectador si se emplean demasiado, pueden llegar a distraer o desenfocar de lo que realmente queremos explicar. Nuestras manos no tienen por qué ser una desventaja a la hora de hablar en público, estas pueden ser un gran aliado si se usan correctamente.
Usar los gestos de las manos con naturalidad y prudencia es algo que te puede beneficiar mucho para atraer la atención del público. Pueden usarse para señalar el material de apoyo (ya sean laminas con información, o un señalador de diapositivas), crear ejemplos para explicar mejor un punto en específico o simplemente moverse para crear familiaridad con el espectador.
Uno de los consejos más importantes que debes tomar en cuenta es la práctica, al principio puede parecer tedioso, pero con practica lograras mostrar una mejor presencia y seguridad en el lenguaje corporal, esto ya que la mayoría de los movimientos que hacemos son inconscientes, si hay alguno que sea inapropiado para dar una buena presentación, la práctica hace posible moldearlo para obtener algo mejor.
La importancia de la postura al hablar en público
Hablar en público puede ser un reto si no estamos acostumbrados, pero con una buena práctica y presencia, es posible transmitir y obtener la seguridad que se necesita para una conferencia. Es muy importante mantener una buena postura durante el tiempo que estemos en este entorno, de esta forma hacemos que el espectador encuentre interesante el objetivo de tu presentación.
Una mala presentación tiene muchos factores que hacen que la audiencia pierda el interés, el lenguaje corporal es uno de ellos. Si damos una apariencia desganada, desinteresada o insegura, ten en cuenta que el interés disminuirá durante la presentación. Las posturas que generan mala imagen como el encorvamiento de la espalda, esconder tus manos atrás de ella o cruzar las manos frente a ti, hay que evitarlas a toda costa.
Una postura natural y un lenguaje expresivo hará que los espectadores sientan familiaridad y comodidad cuando nos dirigimos a ellos, creando un pequeño vínculo que hará que nos presten toda la atención posible. Una postura neutral y movimientos fluidos (para nada forzados, deja que todo salga natural), pueden brindarnos unos excelentes beneficios en cualquier lugar.
En una conversación es importante mantener un lenguaje adecuado de forma verbal y no verbal, es decir, hablado y corporalmente. El mensaje que queremos transmitir por medio de nuestra voz debe encajar con la actitud que mostramos, así logramos obtener una armonía que se verá bien tanto estética como pedagógicamente.
Según la postura que utilicemos al explicar un tema podemos generar contacto visual o desinterés en el público, por lo que es algo que debemos manejar muy bien. La naturalidad y el énfasis con que exponemos puede darnos un lugar en el entendimiento de muchas personas si usamos estas tácticas y consejos correctamente.
Una postura correcta al hablar no solo será agradable para el público, sino que también te ayudará a sentirte seguro y confiado luego de mantenerla un rato, después de ello podrás expresarte más cómodamente.